LA AMISTAD REQUIERE UN POCO DE CONOCOMIENTO DE LA OTRA PERSONA
Le dije a mi amiga Patty: “sugiéreme un tema para escribir un mensaje de ánimo”. Y me dijo: “no sé, habla sobre la amistad”. Y tal vez podría yo inspirarme y hablar cosas muy bellas sobre los amigos y la amistad, pero se me ocurrió pensar que debo hablar sobre la importancia de conocer bien a tus amigos. Porque una de las características de los amigos es que se conocen lo suficiente.
Le pregunté a otro amigo: “¿sabes cuál es el color favorito de tu mejor amiga?” Y me responde: “¡ups, no! Y parece un detalle sencillo y hasta gracioso, pero se supone que conozcamos un poco acerca de los gustos de las personas que queremos. Porque a veces estamos tan cercanos a ellos, conversamos, la pasamos bien, pero desconocemos cosas, detalles muy importantes de sus vidas.
Por ejemplo, ¿cuáles son sueños o pasiones? Esas que no le cuentan a nadie porque tal vez nadie aún se ha interesado en preguntarles. No se trata de ser exigentes ni de hacer las cosas por obligación. Sino de hacerlo por un interés genuino de poder conocer a ese amigo o amiga que tanto estimamos y queremos. El amor hace que queramos conocer mejor a las personas y preocuparnos por ellas.
Sé por ejemplo, que a mi amiga Janet le gusta mucho el color morado y todo lo que tenga que ver con mariposas. De hecho, a veces cuando veo mariposas, la recuerdo a ella. Siempre por más ocupadas que estemos, tratamos de no perder la comunicación. Por tal razón, nos llamamos y nos visitamos. Si no nos da tiempo de una cosa o de la otra, nos mandamos aunque sea un breve email. Yo sé que puedo contar con ella, pero ella sabe que también puede contar conmigo. Precisamente esa es una de las cosas que saben los que son verdaderamente, que se tienen el uno al otro.
Más aún si yo considero que Dios es mi mejor amigo, debo de saber qué cosas le agradan y para conocer las cosas que le agradan, debo ir y leer la Biblia. Porque allí encontraré muchas de las cosas que a él le agradan. Sé que a mi Dios le gusta que seamos obedientes y humildes. Que ayudemos al prójimo, que seamos luz y amor. Entonces mediante los actos de mi vida, con las cosas que yo hago, trato de agradarle y de hacer que él se sienta feliz de contar con una amiga como yo. Y no lo hago por imposición, lo hago por que me gusta agradarlo. Porque él prepara puestas de sol maravillosas para mí, me cuida y me protege siempre. Me escucha todo cuánto quiera hablar y siempre está accesible para mí.
Hoy es un buen día para meditar en quiénes son tus amigos y las cosas que conoces o desconoces de cada uno de ellos. Y si entiendes que hay algo que desconoces, es un buen día para hacer una llamada, enviar una tarjeta, una invitación a almorzar o cenar, o cualquier cosa creativa que se te ocurra.
Parte de ser buenos amigos es conocer en su esencia, no solo de manera superficial a nuestros más queridos amigos. Si no conoces a Dios aún estás a tiempo de formar una amistad maravillosa con él.
Escrito para www.mensajesdeanimo.com
Autora: Brendaliz Avilés
gracias por esas palabras